El pasado jueves fue detectado por los Mossos d’Esquadra un servidor ubicado en Turquía que se dedicaba a la difusión de campañas publicitarias suplantando la identidad de marcas muy reconocidas tanto de moda como de complementos y electrónica. Esta campaña ofrecía enormes descuentos para el Black Friday que se celebra hoy e imitaban a la perfección las páginas web oficiales.
El objetivo era engañar a los compradores para que, influenciados por los grandes descuentos, adquirieran varios artículos mediante el pago con tarjeta y a parte de que nunca los recibirían los infractores podrían usar estos datos para la realización de varios actos ilícitos.
La policía catalana también a tenido que poner sobre aviso a la Organización Internacional de policía criminal (INTERPOL) ya que en los últimos años el Black Friday ha llegado a ser un acontecimiento a escala mundial y este acto criminal podría estar afectando a otros países.
En este tipo de campañas de compras masivas hay que tener especial cuidado con el phishing, que así es como se llama esta practica fraudulenta, y contrastar las ofertas exageradamente atractivas y comprobar que las paginas donde ponemos nuestros datos cumplan con los requisitos de seguridad.